Partimos de unos ingredientes de excelente calidad:
Manos y callos de ternera gallega.
Lavamos muy bien
las manos de ternera (trozos) y los callos troceados en abundante agua
fría y añadimos el zumo de dos o tres limones. Los mantendremos en agua
fría en el frigorífico hasta el día siguiente.
Ingredientes:
3 manos y 6 ó 7 kilos de callos de ternera gallega .
2 kilos de excelentes garbanzos.
3 ó 4 limones.
850 gramos de buenos chorizos.
500 gramos de jamón serrano.
2 ó 3 secciones de codillo de jamón.
150 gramos de tocino casero.
2 cebollas grandes.
1 ó 2 cabeza de ajos rojos.
Perejil.
1 chorizo picante.
1 ó 2 hojas de laurel.
Nuez moscada.
Clavo en especia al gusto.
5 guindillas o másss, ja,ja,ja a gusto de los comensales.
Pimentón agridulce de La Vera.
Cominos.
2 trozos de pan de barra del día anterior.
Aceite de oliva virgen extra.
Sal.
Preparación:
Rico, rico, rico; ¡qué ricos ingredientes para acompañar a esta sabrosa vianda!.
1º.- En el
interior de una bolsa con forma de red o malla introducimos un chorizo
picante, el trozo de tocino, las dos cebollas, la cabeza de ajos rojos,
abundante perejil, una hoja de laurel, una cucharada generosa de
cominos, dos o tres clavos o más a vuestro gusto, una cucharadita de
nuez moscada y las cinco guindillas.
2º. Hemos cortado los callos y las tres manos de ternera gallega en
pequeños trozos que pondremos a cocer en agua fría. Cuando el agua
comience a hervir y transcurridos dos o tres minutos escurrimos el agua y
volvemos a iniciar la cocción de nuestros ingredientes introduciendo la
bolsa con los mencionados ingredientes.
3º.-
Salteamos ligeramente en un poquito de aceite de oliva virgen extra las
rodajas de chorizo y el jamón durante unos minutos y reservamos.
¡Qué bien huele!.
Sabroso, rico, rico, rico...continuamos, continuamos...
4º.-
En abundante agua fría, comenzamos a cocer durante una hora a fuego
lento los dos kilos de excelentes garbanzos
acompañándolos con dos buenas secciones de sabrosos codillos de jamón
serrano hasta que los garbanzos estén tiernos, tiernos de verdad.
5º.- Troceamos los codillos cuando estén tiernos
en pequeños pedazos -¡qué ricos!- y los incorporamos a los garbanzos
manteniendo la cocción durante unos minutos más; reservamos.
6º.- Han transcurrido dos horas de cocción a fuego lento
en agua fría con un poco de sal gruesa y las manos de ternera y los
callos ya están tiernos. Un agradable aroma a comino está presente en
nuestra cocina pero aún nos quedan varias tareas para alcanzar el éxito
culinario.
7º.-
Escurrimos muy bien los exquisitos garbanzos y los incorporamos sobre
los callos tiernos que los reciben dispuestos a acompañarlos en el
apetitoso viaje que aún deben compartir a fuego lento durante unos
minutos más entre cálidos fogones.
8º.-
Añadimos sobre nuestros ingredientes una o dos generosas cucharadas más
de cominos, media cucharada de pimentón agridulce de La Vera y removemos
despacito manteniendo nuestra olla afuego lento, lento durante 10
minutos más.
9º.- Ha
llegado el momento de incorporar a nuestros ingredientes el sabroso
chorizo y el exquisito jamón serrano con su tocinito exterior. Removemos
suavemente durante dos minutos y mantenemos nuestra generosa olla a
fuego lento; muy lento.. El aroma en la cocina es muy agradable, bueno,
ya os lo podéis imaginar; ¿no?....
10º.-
Situamos sobre nuestros ingredientes dos trozos de barra de pan del día
anterior y esperamos unos minutos más hasta que la miga y la corteza
estén muy tiernas y absorban el sabroso caldo que se ha estado formando
durante más de dos horas de cocción lenta. Continuamos la cocción a fuego lento, despacio, despacio, despacito, sin arrebatar a nuestros ingredientes.
11º.-
En un mortero o en una taza aplastamos las cebollas, los ajos, el
perejil-en esta ocasión no lo he utilizado como ingrediente-el pan, unos
cuantos garbanzos y salsa hasta formar una pasta espesa y sabrosa.
12º.-
Para finalizar, incorporamos sobre nuestros exquisitos ingredientes el
"espeso preparado", rectificamos el punto de sal y transcurridos unos
quince minutos a fuego lento, comenzamos a servir a nuestros afortunados
comensales.
Os animo a
cocinar este exquisito y emblemático plato de nuestra cocina tradicional
y a degustarlo alrededor de una mesa generosa en compañía de vuestras
familias y de vuestros amigos sin prisa alguna maridando generosamente :) esta sabrosa vianda con un sabroso y afrutado vino joven tinto Mencía; os encantará.
Indudablemente,
si queréis repetir la degustación de un exquisito segundo o tercer plato
más de callos con garbanzos sería muy recomendable que os animarais a bailar antes de reiniciar la agradable fazaña que os espera.